Cómo preparar a los estudiantes: 5 consejos para ayudar a potenciar el enfoque estudiantil
El entorno educativo tradicional ha dependido durante mucho tiempo de estudiantes atentos y pasivos para establecer el tono de una instrucción productiva. Sin embargo, estas características no son las condiciones naturales de la mayoría de los estudiantes, en particular de los estudiantes más jóvenes que anhelan experiencias de aprendizaje más interactivas. El aprendizaje remoto, que se ha convertido en una alternativa cada vez más popular frente a los formatos de aprendizaje presencial, puede dificultar aún más la participación de los alumnos, a menos que se empleen estrategias particulares para ofrecer más oportunidades de interacción y colaboración en sus entornos de aprendizaje virtual.
Afortunadamente, existen varias formas de aumentar la preparación y la participación de los alumnos, ya sea en una experiencia de aprendizaje híbrida o completamente remota. En este blog, exploraremos algunos consejos y estrategias que pueden ayudar a respaldar la preparación de los alumnos y capacitarlos en su viaje educativo.
Comprender el por qué antes del cómo
Aprender algunas técnicas de enseñanza puede ayudar a cambiar el estado de su salón de clases, pero no garantizará su efectividad como docente. Cuando comprenda el propósito de la preparación del alumno, estará más dispuesto a hacer ajustes de forma natural a su estilo de enseñanza, gestión de aula y planificación del programa para fomentar el éxito estudiantil.
La preparación del alumno es la capacidad de un estudiante para tomar la información nueva y procesarla de una manera que cambie los comportamientos o conduzca a los resultados académicos deseados. En esencia, es la capacidad de una persona para participar activamente en el proceso de aprendizaje y asumir la responsabilidad de la información aprendida. Las siguientes estrategias animan a los estudiantes a convertirse en participantes activos, en lugar de espectadores pasivos.
1. Enfoque la clase
Ya sea que dicte un curso presencial o un seminario en línea, tómese un breve momento al comienzo de cada clase para monitorear el enfoque de sus estudiantes. Comience con un rápido ejercicio, como compartir un momento positivo de su fin de semana o preguntarles si tienen alguna duda o comentario sobre la lección anterior.
Además, puede animar a los alumnos a sentarse o pararse en silencio durante un minuto y guiarlos a través de ejercicios de respiración lenta y profunda. Esto aumentará el flujo de oxígeno al cerebro, eliminará el estrés y creará la oportunidad de estar presente y en el momento. Se ha comprobado que fomentar la meditación breve, o la respiración lenta, ayuda a calmar y concentrar a los alumnos de todas las edades.
2. Proporcione salidas sensoriales.
Además de los ejercicios de respiración al comienzo de la clase, permita algunos descansos sensoriales dentro del horario de la clase. Anime a los estudiantes a tomar descansos periódicos para reagruparse o reiniciarse antes de sumergirse en un nuevo tema o sección del material. Esto ayuda a los alumnos a no sentirse abrumados o frustrados con un curso o materia. Alguna actividad lúdica, trabajar en un proyecto de arte o incluso dar un simple paseo al aire libre puede ser el descanso sensorial necesario para recuperar el enfoque. Programar descansos en su lección para este tipo de «descansos para el cerebro» ayuda a los estudiantes a regresar a la clase renovados y listos para absorber más conocimientos.
3. Incluya el movimiento en la fórmula.
Muchos profesores se sienten frustrados por la cantidad de estudiantes que se mueven y están siempre inquietos, pero el movimiento no perjudica el aprendizaje. De hecho, el movimiento es una forma de mejorar eficazmente las funciones cognitivas. En primer lugar, el movimiento aumenta el flujo de sangre rica en oxígeno al cerebro. Esto estimula las redes neuronales y mejora el rendimiento tanto con los procesos de pensamiento como con el de la memoria. El movimiento también mejora la moral y la motivación del alumno.
Sin embargo, hay algo que se debe tener en cuenta sobre el uso del movimiento en el aprendizaje. Algunos movimientos pueden ser ruidosos y distractores, como la locura de los fidget spinners de hace algunos años. En lugar de estos elementos, fomente el movimiento con pelotas de yoga, bandas de asientos inflables, cojines que se mueven o incluso anime a los alumnos a que se tomen uno o dos minutos cada hora para levantarse y estirarse. Estas actividades ofrecen a los estudiantes la libertad de generar algo de movimiento sin interrumpir el enfoque del aula.
4. Desarrolle habilidades cognitivas básicas.
Un alumno exitoso tiene la capacidad de centrar su atención en la información que se le ofrece. Puede ayudar a los estudiantes a desarrollar habilidades cognitivas básicas que puedan aprovechar. La falta de procesamiento de la información afecta la capacidad del estudiante para entender, leer y escuchar; pero los ejercicios de entrenamiento del cerebro pueden sentar una nueva base que el estudiante puede aprovechar para aprender.
Hay programas en línea que ofrecen módulos de práctica individualizados y que se centran en las habilidades de lectura y producción oral. Sin embargo, como docente, el uso de diversos métodos de instrucción también aumenta el desarrollo cognitivo. Las canciones, la repetición, las imágenes, la instrucción kinestésica y el contenido ludificado ofrecen a los estudiantes muchas formas de interactuar con el material y retener la información que han aprendido.
5. Fortalezca el proceso en lugar de los resultados.
En lugar de centrarse en los resultados deseados del alumno al que está enseñando, concéntrese en el proceso de aprendizaje y la necesidad específica de ese alumno. Cree informes personalizados que reflejen cómo los alumnos se involucran con su contenido de aprendizaje en línea para revelar el alcance del aprendizaje que se ha producido. Si tienen que repetir lecciones o ciertas áreas dentro del curso, vale la pena evaluar cómo puede desarrollar la preparación del alumno en esa área para obtener una experiencia óptima. Diseñe cursos con experiencias de aprendizaje contextuales que permitan a los alumnos sumergirse en la aplicación de una lección en un escenario de la vida real. Reconozca los esfuerzos y no la memoria innata que muestra el estudiante. Esto creará una mentalidad de crecimiento que fomenta y recompensa el trabajo duro y la dedicación para que los alumnos estén listos para recibir y retener la información durante todo el proceso, no solo cuando se trata de prepararse para un examen o una evaluación.
Como existen diferentes estilos de aprendizaje en cada grupo de estudiantes, una forma de instrucción seguramente funcionará mejor para un tipo de alumno que para otro. Es por eso que la instrucción diversificada y un ambiente de aprendizaje adaptado son cruciales para el éxito de los estudiantes. Por estas razones es necesario emplear una variedad de estrategias de participación, pues le dan a cada alumno la oportunidad de explotar su potencial.
La creación de una solución que fomente la preparación del alumno, incluso de forma remota, es completamente posible gracias a los continuos avances y mejoras en la tecnología de aprendizaje en línea. El contenido de vanguardia, junto con una solución flexible y escalable, puede permitirle incorporar enfoques de aprendizaje más atractivos e interactivos, y así brindar oportunidades de colaboración y conexión entre alumnos e instructores.
Para obtener más información sobre cómo crear una solución que fomente la preparación del alumno y capacite a su equipo con una instrucción atractiva, contacte a los expertos de la plataforma de Open LMS o solicite una demostración individual pulsando el siguiente enlace.